lunes, 15 de noviembre de 2010

El espíritu del nuevo milenio

Si he estado aparte de todo, la verdad, no se. Me parece que somos demasiado superficiales, capaces aún de llamar lo común normal. Siendo así las cosas, a veces me abraza la desesperanza. Alguna vez creimos que habiamos conquistado la razón, que estabamos por encima del bien y del mal, que teniamos una lupa para escrutar y conocer todo, una medida por fin humana para juzgar todo. Pero al fin volvio la emoción, lo intimo, lo irracional. La mayoría de los intelectuales juzgan la sociedad con el placer acariciando sus vientres, es fácil verlo cuando a tu lado pasa un ferrari con una calcomania del Ché, o cuando ves aquel personaje a la vez alegre y a la vez sombrio, seduciendo jovencillas con batallas libradas por otros, o cuando Roman P. no puede entrar a un país por que sus absurdas constumbres lo juzgan de pedofilo.

Veo que el mundo no vale nada, sus valores, sus tragedias, el llanto, si yo no logro satisfacer este placer, que hoy asesinen a guerrilleros, paramilitares, campesinos, bebes, mujeres, hombres, niños, animales, si nada es tan malo como quieren hacerlo parecer algunos. Si siento necesidad de sufrir, agonia, angustia, algo que no conozco y me acompaña siempre, que importa que sufran otros por mis actos, si soy el rey del mundo con la capacidad de juzgar a otros de manera inclemente, y si me equivoco, que?, todos saben que tan solo fue la opinión de otro irresponsable mas al cual esta vida le parece demasiado graciosa cuando se piensa estar al margen de todo, acaso no tengo la libertad de juzgar a otros en un dialogo constructivo de iglesias ardiendo.

Hoy mis botas aplastaran cualquier cosa que ose meterse en mi camino, tengo mil razones para odiar todo, por que las razones, veridicas o no, me son suficientes para arrazar cualquier bondad que empañe mis miserias. Creo tener las razones para ser como soy, y con eso me basta, no quiero que nadie piense que sufrí por nada, que sufrí por ser humano, que sufrí por irracionalmente pensar que mi razón lo podía todo.

Hoy llenare de llanto el espacio sideral, hoy no habra espacio en lo vacio del cosmos, mi egoismo y yo reinaremos en todos los corazones!

Sig Heil Mich!

Sig Heil Mich!

Sig Heil Mich!

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